La ruta de los tranvías azules

Ahora que lo retro está de moda, te presentamos una opción turística que pasa desapercibida y sin embargo, nos traslada a una de las épocas más hermosa de Barcelona, se trata de la ruta de los tranvías azules, inaugurada en 1901 para conectar la ciudad con lo más alto del Tibidabo y que representa, hoy en día, el único vestigio de la antigua red de tranvías de la ciudad, jubilada el 18 de marzo de 1971 a favor de la industria automovilística.

La supervivencia del Tramvia Blau responde más a un sentimiento de nostalgia y romanticismo que a la practicidad del propio servicio. No es de extrañar. Recorrer a bordo del tranvía el kilómetro que separa la plaza John F. Kennedy del funicular del Tibidabo es una auténtica delicia, con ese clásico vaivén que proporcionaba antaño este medio de transporte, cuando Barcelona dejaba de ser una pequeña ciudad y se hacían imprescindibles nuevos medios de transporte.

A pesar del encanto de este trayecto, no resulta una ruta muy concurrida, lo cual, lejos de ser una molestia, se convierte en todo un placer, puesto que podemos disfrutar del paisaje de la zona alta de Barcelona, de sus mansiones, parques y jardines, sin distracciones.

El precio del billete sencillo del tranvía azul es de 3 euros ida y 4,70 ida y vuelta, así que por lo mismo que nos cuestan un par de cañas, podemos vivir una de las experiencias más románticas de la ciudad, si además quieres inmortalizar el momento, que mejor que subir a tu Facebook una de esas fotos vintage tan de moda, desde luego, ¡el escenario es inmejorable!

Manuel Yais

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Fuente imágenes: trenscat.com, tmb.cat y barcelonabusturistic.cat